wü es un sonido del silencio
Psicología con el propósito de acompañar el proceso de reflexión, curación y concienciación de aquellas personas en búsqueda y recuperación de sentido vital.
La crisis existencial que vivimos es el resultado de una pobre percepción de nosotros mismos.
Por ello planteo un trabajo simple y profundo desde el que poder reorganizarnos, hacer una nueva valoración de nosotros mismos y reconfigurar nuestro mapa vital.
¿quién soy?
¿hacia dónde voy?
Trabajar con estas preguntas es el punto de partida.
Orgasmo
Comparto aquí una reflexión relativa al texto imprescindible de Casilda Rodrigáñez Pariremos con placer, en la Explicación fisiológica del parto orgásmico.
El útero es un músculo. El músculo con mayor capacidad adaptativa y mayor fortaleza y flexibilidad.
Su anatomía se configura con 3 tipos de fibras: las fibras circulares, las longitudinales, y las intermedias, en forma de espirales y ochos.
Las fibras circulares son las que se ocupan de sostener dentro del útero lo que está dentro. Encontramos más densidad de fibras circulares al acercarnos a la base y el cuello del útero. Éstas fibras serán las que se distiendan para dilatar el cuello del útero, para permitir que el bebé o la menstruación tengan salida. Estas fibras están inervadas en el sistema nervioso simpático. En una explicación muy rápida podemos decir que el simpático responde a las situaciones de activación -agitación, peligro, alerta-.
Las fibras longitudinales, a lo largo del útero, son las que al contraerse empujan hacia el exterior lo que está dentro del útero. Están inervadas al sistema nervioso parasimpático, que responde a las situaciones de calma.
Las fibras longitudinales y circulares han de funcionar a la par para que el movimiento del útero sea eficaz. Mientras las longitudinales se acortan las circulares han de distenderse para no ejercer resistencia.
Así, si existe una activación del sistema simpático, las fibras circulares no cederán al efecto de la dilatación.
Si un movimiento natural del útero se encuentra con la resistencia de parte de su anatomía, el funcionamiento deja de ser eficaz, y además se produce dolor.
Las terceras fibras, las espirales, se encargan de abastecer de lo necesario a las fibras musculares del útero en su trabajo.
Lo que más duele en el parto es el miedo
El miedo como respuesta a estímulos externos e internos: miedo al cambio, miedo a lo desconocido, miedo a la verdad...
Me parece muy interesante,
muchísimo, romper los esquemas-formas habituales de organizar la información,
no hablamos tanto de sistema nervioso, sino de sistema sexual. Reorganizar la
información; en lugar de mirar anatómicamente, hacerlo funcionalmente para poder comprender lo que sucede.
Me parece importante para
no perder el foco apntar que tal y como presenta
el funcionamiento del útero Casilda R. en este trabajo, el orgasmo no hace
referencia al momento de culminación de una relación genital, sino al mismo
movimiento del útero que es en sí mismo placentero. No es por tanto un nivel del
placer que haya que alcanzar para considerar un parto como “orgásmico”, sino
que el orgasmo es el movimiento natural y libre del útero, que implica
una descarga de líbido –energía vital-.
La cantidad de placer –sensación
subjetiva- vendrá determinada por la capacidad de recepción de oxitocina y
otras hormonas de ése organismo y por la capacidad psíquica de entregarse al
placer, y supongo también por el progreso que haga el útero en ese ciclo de
expansión y concentración que finaliza en el orgasmo. Igual que en un ciclo de respiración en alguna de esas buenas respiraciones, puede suceder algo distinto, quizá se liberará algo más el tejido que hará que sea especialmente placentera. Hay orgasmos que nos llevan más allá de donde
normalmente estamos, y ahí enlazo con el trabajo de Odent Las funciones de
los orgasmos y el papel que juega la oxitocina en el estado ampliado de consciencia.
El movimiento del útero
durante el orgasmo –como fin de coito-, el movimiento del útero en la
menstruación expulsando el endometrio y el movimiento del útero en el parto, es
el mismo movimiento. Y es el mismo movimiento que sucede unas octavas más bajas en muchos momentos de
la vida cotidiana.
El orgasmo es un movimiento del útero
El movimiento del útero es en sí mismo placentero.
Lo que duele es que no se mueva, que esté bloqueado.
El cuerpo femenino es biológicamente placentero.
La oxitocina anima al movimiento del útero, pero un paso más allá, el movimiento del útero genera la secreción del oxitocina.
La oxitocina altera, amplia, el estado de consciencia.
Ahí está el "Planeta Parto" en unos niveles de oxitocina más altos de lo que ninguna otra situación puede dar. También en la capacidad de entrega, la cualidad sensible de cómo una percibe la experiencia,
"una puede vivir pensando que nada es un milagro o que todo lo es".
Aquí es donde está el disfrutar de la menstruación, del estado de consciencia diferente que nos da, de lo que sucede cuando una presta atención a lo que emerge a la superficie en la onda que empieza en el útero expulsando en endometrio.
Es impresionante que los
estudios del funcionamiento del útero, científicos, con miouterogramas que datan de 1966 sigan sin
formar parte de la información accesible a todos en los libros de texto.
Me parece muy interesante el potencial
revolucionario de ésta información, que crea un movimiento de afirmación
instantáneo en muchas mujeres. Hace que se despierte en una la necesidad de
recuperar su cuerpo, de conocer cómo funciona la propia vida.
Interesante también el
pudor colectivo al usar la palabra Orgasmo.
El orgasmo es nuestro,
recuperémoslo.
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